¡Tienes que probarlas! 12 de las tartas más famosas del mundo (3 of 3)

9. Tres leches

Países como México y Nicaragua se disputan la invención de la tarta tres leches, pero lo cierto es que se consigue en casi todos los países de América Latina, como El Salvador, Colombia, Venezuela, Chile y Ecuador. Se cree que surgió en el siglo XIX pero se popularizó en la década de 1940, cuando la compañía Nestlé publicaba la receta en las etiquetas de sus productos lácteos. Esta tarta es elaborada con bizcocho sumergido en tres tipos de leches: evaporada, entera y condensada. Algunas personas la cubren con merengue.

10. Cheesecake estilo Nueva York

Elaborada con crema de leche espesa, huevos, vainilla, queso crema y crema agria, sobre una base de corteza de tarta o de migas de galleta, la cheesecake al estilo Nueva York es la tarta de queso más famosa. Debe esto a su textura muy cremosa y rica, más densa que otras variantes. Se dice que fue creada en la década de 1950, pero su autor es incierto, pues en esa época la cheescake era uno de los postres más populares de la ciudad, y cada restaurante tenía su versión.

11. Kasutera

Es una tarta tradicional de Japón elaborada con azúcar, harina, huevos y jarabe de almidón. No tiene mantequilla ni aceite, así que es muy suave y esponjoso. También se consigue en varios sabores, como chocolate, miel o té verde, y es común que las personas regalen Kasutera en ocasiones especiales o como suvenir para los turistas. Este postre, que es típico de Nagasaki, se inspiró en la Castella, que fue llevada a Japón por los comerciantes portugueses en el siglo XVI.

12. Tatin

La tradicional tarta de manzana amada por todos, pero con un toque especial: las manzanas son caramelizadas con mantequilla y azúcar, y estas van debajo de la masa, no arriba como es lo normal, así que es como una “tarta al revés”. Se dice que la Tarte Tatin fue creada en el Hotel Tatin en Lamotte-Beuyron, en Francia. Las hermanas dueñas del hotel estaban haciendo una tarta de manzana y, por un descuido, las manzanas se cocinaron más de la cuenta y se caramelizaron. Para no desperdiciarlas, le pusieron la masa arriba y la hornearon.