5 razones por la que los niños también pueden jugar con muñecas (3 of 4)

Souvenir, Souvenir, Toy

4. Desarrollo del habla y el lenguaje

Gracias al juego de pretender, las muñecas ofrecen una gran oportunidad para que los niños aprendan muchas palabras nuevas y desarrollen su capacidad de comunicación. Por ejemplo, con las muñecas pueden aprender más fácilmente las partes del cuerpo, las piezas de ropa, conceptos básicos de colores y tamaños y responder a preguntas de qué, cómo, cuándo, dónde, por qué (“¿qué haces?”, “¿cómo se llama la muñeca?”, “¿cuándo le darás de comer?”, “¿dónde están sus orejas?”, “¿por qué llora la bebé?”, etc.). También le enseña sobre verbos (comer, beber, dormir, pararse, etc.) y sentimientos (feliz, molesto, triste, etc.). Todo esto les ayudará a desarrollar su habla tanto con los adultos como con otros niños.

Hand, Hand, Sleeve, Happy, Gesture

5. Romper con estereotipos de género

Varios estudios indican que los roles de género suelen afianzarse demasiado pronto: a los 5 años, los niños ya buscan realzar su masculinidad para obtener aprobación externa (generalmente de los padres). El problema con esto es que muchas veces se adoptan roles “hipermasculinos” que terminan en conductas asociadas con la “masculinidad tóxica” (como el machismo o la posesividad). Si animamos a los niños a jugar con cualquier tipo de juguete, les ayudamos a desarrollar un pensamiento libre y romper así con estereotipos de género restrictivos. Además, los niños pueden beneficiarse de la autoexpresión facilitada por el juego con muñecas gracias a que son más amplias en cuanto a color de la piel, género, raza, identidad y más.