Ayuda contra la depresión y la ansiedad: 8 pasos que realmente marcan la diferencia (3 of 5)

Los buenos hábitos de sueño son imprescindibles

Esto parece obvio, y sin embargo no se trata solo de dormir lo suficiente —la falta de sueño puede agravar la ansiedad y la depresión— sino también de evitar dormir en exceso, ya que eso puede provocar lentitud y entumecimiento emocional. Los expertos recomiendan entre siete y nueve horas de sueño reparador cada noche y mantener horarios regulares para acostarte y levantarte. Guarda el celular una hora antes de dormir o procura que tu habitación esté fresca y oscura. Son solo un par de rituales nocturnos que mejoran la higiene del sueño y brindan una capa adicional de apoyo frente a la depresión y la ansiedad.

Aliméntate bien

Nunca subestimes la importancia de una nutrición equilibrada para mantener una buena salud mental. Una dieta rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras alimenta tanto tu cuerpo como tu mente. No es necesario eliminar por completo la cafeína, el azúcar o los alimentos ultraprocesados (a menos que tu médico lo indique), pero sí es recomendable reducirlos, especialmente si notas que afectan tu ánimo o tus niveles de energía. Estos hábitos alimentarios pueden formar parte de un enfoque integral contra la depresión, fortaleciendo con el tiempo tu resistencia mental y física.