¿Estás enamorado o simplemente adicto? 7 señales de que podrías tener una adicción al amor (2 of 4)

Si eres un adicto al amor evitativo, saboteas activamente el desarrollo de la intimidad emocional

Hay dos tipos de adictos al amor: los obsesivos y los evitativos. Esa combinación suele atraerse entre sí y dar lugar a una relación simbiótica y tóxica. Funciona así: el obsesivo persigue al evitativo; este, abrumado por la cercanía, genera la distancia necesaria para evitar que surja una relación auténtica, pero sin cortar del todo, lo que permite que el obsesivo siga persiguiéndolo. La relación se mantiene porque ninguno de los dos quiere sentirse abandonado.

Tu obsesión amorosa puede derivar en algo peligroso

Las personas con adicción al amor obsesiva se fijan en el objeto de su adicción y, en casos extremos, eso puede traducirse en conductas como acechar a esa persona, perseguirla, bombardearla con mensajes sin parar e incluso amenazar con hacerle daño si siguen siendo ignoradas. Con frecuencia, quienes sufren este tipo de obsesión también padecen trastornos mentales serios.