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10 mascarillas caseras para cuidar tu cabello graso
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Muchas personas creen que al tener el cabello graso deben evitar las hidrataciones, los acondicionadores y lavárselo todos los días. Pero lo cierto es que los lavados deberían ser menos frecuentes y la nutrición es necesaria, sobre todo porque este tipo de cabello tiende a ser graso en las raíces, muchas veces con caspa y con suciedad acumulado, pero seco en las puntas. Acá te presentamos 10 mascarillas que puedes elaborar en tu casa con ingredientes naturales para que luzcas una melena espectacular. Aplícalas una o dos veces por semana.
1. Miel, vinagre de manzana y limón
Esta mascarilla es ideal para limpiar la acumulación de suciedad y productos. Por su acción astringente, se recomienda usarla solo una vez a la semana. Necesitarás el zumo de 1 limón pequeño, 1 cucharada de miel, 2 cucharadas de vinagre de manzana y 3 cucharadas de agua. Mezcla muy bien aplica inmediatamente desde el cuero cabelludo hasta las puntas. Deja por 15 minutos y enjuaga completamente con agua fría. El limón desintoxica el cabello, la miel es un humectante natural y el vinagre ayuda a equilibrar el pH del cabello.
2. Aloe vera
El aloe vera, también conocido como sábila, te ayuda a remover el exceso de grasa de tu cuero cabelludo y a refrescarlo, sin resecar. Esto es muy importante sobre todo cuanto la grasa produce caspa o dermatitis. Todo lo que tienes que hacer es extraer la pulpa y el gel de 1 hoja de sábila y mezcla con unas gotas de zumo de limón. Una variación más hidratante es sustituir el limón con 1 cucharadita de aceite de almendras. Aplica en el cuero cabelludo, masajeando las raíces, y deja por 30 minutos. Lava y acondiciona como de costumbre.
3. Romero y aceites esenciales
Además de tratar el cuero cabelludo graso, se dice que esta mascarilla también ayuda con la caída de cabello asociada a esto. Hierve romero fresco (lo que saques de 2 o 3 ramitas) en una taza de agua. Cuela, deja enfriar y añade 7 gotas de aceite de árbol de té y 5 gotas de aceite esencial de hierba limón (lemongrass). Coloca la mezcla en una botella con atomizador y rocía por todo el cabello, masajeando el cuero cabelludo. Deja toda la noche y lávalo como de costumbre en la mañana. Estos aceites esenciales equilibran la secreción de sebo, y el nutritivo romero ayuda con el crecimiento.
4. Almidón de maíz
Esta seguramente será la mascarilla más fácil en esta lista. Todo lo que debes hacer es colocar 1 cucharada harina de almidón de maíz, también llamada maicena, en un salero o algo parecido (puede ser también un colador fino), y rociarla en tu cabello y cuero cabelludo completamente secos. Deja reposar por 10 minutos y retiralo cepillando con un cepillo de cerdas suaves. No necesitas lavar. La maicena ayuda a absorber el exceso de oleosidad y dejara tu cabello suave. Esto es tanto una mascarilla como un método de lavado en seco.