Té de jengibre: aprende a prepararlo y aprovechar sus beneficios (3 of 3)
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Cuidado: efectos secundarios
Todo en exceso puede ser dañino, incluso una planta tan saludable y beneficiosa como el jengibre. Consumir demasiado (la dosis recomendada de té de jengibre es de no más de 2 tazas al día) puede causar gases, inflamación, acidez y náuseas. Además, debido a que el jengibre puede tener un efecto anticoagulante, las personas que toman medicamentos anticoagulantes o para la presión sanguínea deberían consultar con sus médicos antes de consumirlo.
Té de jengibre: receta original
En el mercado es posible encontrar bolsitas de té de jengibre o presentaciones en polvo instantáneo. Pero si quieres aprovechar las bondades de esta raíz de la forma más natural posible, prueba a prepararlo de la siguiente forma:
Ingredientes
- 4-6 rodajas de jengibre
- 2 tazas de agua
- Zumo de limón al gusto (opcional)
- Miel o endulzante al gusto (opcional)
Preparación
Lava muy bien el jengibre crudo y pélalo. Corta las rodajas finas. Vierte el agua en una olla, agrega las rodajas y deja hervir a fuego medio-bajo por unos 10-15 minutos. Retira del fuego y pasa por un colador para eliminar las rodajas y cualquier resto de la raíz. Añade el limón o el endulzante al gusto y sirve caliente.
Variaciones
El té de jengibre por sí mismo es delicioso, cálido y reconfortante, pero si quieres probar otros sabores y añadir ingredientes que potencien sus efectos beneficiosos, acá de damos algunas ideas.
- Té de jengibre y cúrcuma: Una bomba antiinflamatoria y antioxidante. Añade algunas rodajas de raíz de cúrcuma a la preparación original y una pizca de pimienta, necesaria para activar la curcumina. También puedes usar cúrcuma en polvo, la punta de una cucharadita. Hierve normalmente y cuela.
- Té de jengibre y canela: La bebida perfecta si te gustan los sabores especiados y si quieres aumentar las propiedades reguladoras del azúcar en la sangre. Simplemente añade canela al gusto al momento de hervir, bien sea en rama o molida.
- Té verde con jengibre: El té verde también contiene propiedades antioxidantes y un plus de cafeína para arrancar el día. Prepara media taza de té verde siguiendo las instrucciones y mezclalo con media taza de té de jengibre.
- Té de jengibre y menta: Amarás esta combinación que equilibra la calidez del jengibre. Añade unas hojas de menta al té cuando esté a punto de hervir. Cuela. Esta bebida también puede tomarse helada.